
La semana pasada no me atreví a escribir nada en el blog, me sentía bloqueada, quizá era por lo mucho que quería transmitir o simplemente eran tan poco que no sabía ni como orientarlo. Fue ahí cuando una amiga me dijo: marticaaaaaa,¿por qué no hay entrada hoy martes?, en ese instante me dije, ¿por qué no he sabido de que hablar esta semana?... y una vez más la respuesta la tenía delante....
Todo era culpa del bloqueo mental, exacto. En algunas ocasiones lo tenemos presente y nos provoca un sentimiento que no nos deja avanzar o avanzamos sin sentido. Hay momentos en nuestra vida que nos dedicamos a vivir sin más. Hay momentos muy buenos y otros que te hacen dudar si lo que estás haciendo es lo correcto. Sin duda, la confianza en nosotros mismos muchas veces se descuelga de un hilo cuando menos lo esperamos e incluso sin darnos cuenta. Pero cada uno de nosotros, tiene la capacidad de reconstruirla y avanzar debido a las experiencias vividas y a la gran mochila de vivencias que tenemos a nuestra espalda.
¿Y lo pequeños? Pues los pequeños también sufren esa angustia y son muchas las ocasiones en las que sienten el agobio por no saber qué hacer o el miedo a fallar a quienes son sus modelos. Por ello, debemos hacer que experimenten cambios, debemos dejar que manipulen todo lo que tienen alrededor, que sientan duda o inquietud por lo que pueda pasar. Pero que experimente por ellos mismos las vivencias, y aunque les lleve a un resultado negativo a primera vista no importa porque al final todo ello se convertirá en un aprendizaje positivo a largo plazo. Desde el momento que nacen sufren un cambio brutal: de encontrarse en el vientre materno a un mundo tan susceptible e indefenso para ellos como es la socialización. Pasan de ser un ser biológico a un ser sociocultural. Es ahí cuando empieza nuestra labor como agentes socializadores para ayudarles en esta sociedad a veces tan complicada. Lo que necesitan es la confianza de las personas más cercana a ellos, la familia, los amigos con lo que irán avanzando y aprendiendo.
Hoy os hablo del EFECTO PIGMALIÓN, se define como las expectativas de los padres con sus hijos, de los profesores con los alumnos. Es el efecto que llevo en mi día a día, según sea la expectativas que tu deposites en tus alumnos estos llegaran a ser de una forma u otra. Llevado a un ámbito más adulto, podéis comprobarlo por vosotros mismos...¿os sentís identificados? Cuando no dabas nada por nada, alguien te tocó la espalda y te dijo que podías y al final lo conseguiste. Seguro que cada uno de los que me estáis leyendo este post tenéis a una persona cerca que confía a pesar de todo en vosotros, quizá mañana todo sea diferente, pero ahora, en este momento, CONFÍA EN TI.
Los pequeños necesitan de esa confianza y de esas expectativas para avanzar en todo su proceso, son ellos los que necesitan fallar para saber que la vida da más oportunidades, son ellos lo que poco a poco deben construir su propia identidad y su rol en la sociedad a la que pertenece pero sois vosotros los que debéis confiar en ellos para que puedan conseguirlo.
El otro día trabajando la resiliencia en un curso, que es la capacidad que tenemos las personas para superar una situación difícil y salir fortalecido positivamente de ella, me di cuenta de la importancia que tiene este efecto para que cada alumno cree su propia autoestima y consiga la capacidad suficiente desde pequeño de luchar y avanzar sin miedo a nada.
Hace un tiempo me crucé con una niña que siempre me decía que no sabía dibujar, que el resto lo hacía genial y ella no, mientras todos dibujaban un círculo con ojos, nariz y una enorme sonrisa, a ella solo le salía un punto. Fue ahí, cuando empecé a decirle que ese punto me gustaba y que quizá de ahí otro día podía salir algo más bonito... con el tiempo esa niña consiguió realizar una cara punto a punto.
Meses después en una clase de universidad me presentaron este libro... os dejo el enlace y después me contáis.
https://www.youtube.com/watch?v=-3NLjd8zzYw
Muchas veces solo se necesita un poco de impulso para estabilizarte y avanzar en lo que te hace sentir bien.
¿Pensaste en alguien mientras leíste este post? ¿hubo algún profesor que confió en ti? Espero que sí, y sino, aquí estoy yo para hacerlo.
Cuida a quien confía en ti, lo hace porque ve mucho más en ti de lo que tú muchas veces ves por los miedos o las inseguridades.
Como dice mi fiel compañero MR.WONDERFUL "Qué tus sueños tengan la valentía que le falta a tus miedos"
Si te ha gustado o te has sentido identificado cuéntamelo, o difúndelo!
FELIZ SEMANA Y NO OS OLVIDÉIS DE SONREÍR AUNQUE SEA UNA VEZ CADA 5 SEGUNDOS.
Por cierto,,,,,,,,,, ¿TE QUEDAS CONMIGO?
No hay comentarios:
Publicar un comentario